“Es consigna tuya”, atiza la gente de comunicación social de Presidencia a un reportero durante una platica, y en donde el tema de discusión se centró sobre una publicación que hacía una crítica al primer semestre del gobierno de Andrés Manuel López Obrador.

La forma es fondo, reza el dicho en la política, y la frase es una muestra fiel de la postura que han adoptado desde la trinchera que comanda Jesús Ramírez, vocero oficial del gobierno federal.

El mensaje es uno: “son fifís”, es el calificativo que usan entre dientes las personas que fueron contratadas para fungir como el lazo institucional entre la administración federal y los medios de comunicación.

Por si fuera poco, la improvisación, falta de conocimiento y desdén de esta área a los comunicadores ha provocado una serie de pifias, errores y hasta dolores de cabeza que han escalado hasta el propio jefe del Ejecutivo federal.

La situación es tal que existen voces desde el interior de las altas esferas de Morena que cuestionan el trabajo de Ramírez Cuevas, y en donde comenzaron a circular nombres para sustituirlo antes de que termine el primer año de gobierno.