Con información de: https://siete24.mx/
Ciudad de México.- Era 1998 y Luis Miguel tomó un breve descanso luego de un año muy agitado por el éxito de su álbum Romances, que lo llevó a ser la estrella latina de la música en Estados Unidos; así que viajó a Aspen, Colorado, destino nevado en el que también descansaba Mariah Carey.
Se conocieron en una cena arreglada por amigos en común, pero la primera impresión que el Sol le causó a la estrella del pop no fue buena debido a “su alarmante forma de beber”, detalló años después la cantante en su autobiografía.
Aun así Luis Miguel se las arregló para conquistarla y se volvieron una “pareja efervescente”, eran jóvenes, exitosos y solteros; así que derramaban miel a donde quiera que iban. Por primera vez el ídolo mexicano se dejaba fotografiar por la prensa sin reparos.
Tenían mucho en común, pero había un problema, las apretadas agendas de ambos, a pesar de que adolecían de lo mismo, la falta de tiempo. Aunque al inicio lo parecido que eran sus vidas de famosos les daba comprensión.
Parece increíble pero los celos profesionales fueron parte del fracaso de la pareja. Grabaron un dueto “After Tonight”, y mientras ella quedó encantada a él no le gustó nada, se rumoró que su obsesión con la perfección es tal que no le agradó escuchar su voz opacada por una aun más bella, recaba el Diario argentino La Nación.
Ella lo visitaba en Acapulco y luego coincidieron sus giras en Argentina. Mariah hablaba de él con los medios, él fiel a su estilo, se mantuvo hermético.
La gota que derramó el vaso fue los rumores de infidelidad por parte de Mariah Carey publicados en revistas amarillistas, cuando rodaba su película “Glitter”. Nunca se supo realmente, aunque en las publicaciones de la época se hablaba que ella enfrentaba una depresión por la separación.
Años después ella se refirió al carácter cambiante de Luis Miguel, “apasionado y generoso” cuando estaba de buenas, y “ansioso y errático”.
Las versiones oficiales que dieron ambos en su momento fueron “correctas”:
En su autobiografía Mariah Carey escribió:
“Éramos una pareja efervescente, aunque siempre fue difícil vivir y amarnos mientras estábamos en el foco de la atención.”
Lo único que los medios pudieron sacarle a Luis Miguel fue esta frase:
“Fue una relación muy positiva”.
Su romance fue corto, duró tres años, de 1998 a 2001, pero intenso, tanto que Luis Miguel lo eligió para ser el centro del drama en la temporada tres y final de su bioserie.
Ahora vemos la versión que da Micky.
Netflix transmitió hoy el primer episodio de la tercera temporada de Luis Miguel, la serie.
