El presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, designó a Rafael Fernando Marín Mollinedo como titular de la Agencia Nacional de Aduanas de México (ANAM), quien se encargará de eficientar la operatividad de las zonas fronterizas, y tendrá la responsabilidad implícita de poner un alto a los actos de corrupción.

A casi dos meses de que Horacio Duarte Olivares, renunciara a la titularidad de la ANAM, para integrarse al equipo de la Mtra. Delfina Gómez, en su candidatura por la gubernatura del Estado de México, Marín Mollinedo se convirtió en su sucesor, desde el pasado 7 de diciembre.

Por estructura, las aduanas eran dependencias directamente coordinadas por el SAT, hoy, con la creación de la Agencia Nacional, logran una autonomía organizada, situación que le da el poder a la ANAM, de conducirse bajo estrategias específicas en su funcionamiento, pero que es constantemente vulnerada por actos corruptivos en niveles administrativos, como en lo operativo.

Los casos más resonantes son los señalamientos hacia Felipe Solano Armenta, actual Director de Operación Aduanera, así como los recién nombrados “Los sobrinos consentidos de la Marina”, los hermanos Roberto y Fernando Farías Laguna.

Marín Mollinedo, quien anteriormente encabezó el Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec, actualmente tendrá que impulsar buenas prácticas que contribuyan en la reducción de incidencias negativas y de forma inmediata mostrar resultados a nivel nacional.