Fotos: Gustavo Azem

Llegamos al final de la primera edición del Domination Fest, un evento que pretende ser el sucesor espiritual del posiblemente finado Corona Hell and Heaven y que con creces nos trajo una propuesta interesante para su primera edición, pero como en todo siempre hay grandes cosas, algunas no tantas y detalles que se irán puliendo si se realiza una siguiente edición el próximo año, mientras tanto aquí en Radio Trece en su programa Radio Arkham, les traemos lo bueno, lo malo, lo feo y la sorpresa de este festival:

Lo bueno:

Sin duda los headliners Alice Cooper y Kiss fueron el gran show de estos dos días que tuvo el festival. En ambos se notó la experiencia, los años y la trayectoria en el rock and roll que los hace maestros de los escenarios tanto adentro como afuera con el público.

Por un lado Kiss se presentaría el viernes en el Domination Fest en lo que por ahora sería su última fecha en México en el End of the Road World Tour, por lo que muchos fans de la llamada Kiss Army llegaron a ver a esta legendaria banda que nunca decepciona, ya que con un setlist armado de grandes éxitos, dejando tal vez algunas canciones de lado, lograrían armar la fiesta total que traspasaría generaciones, edades, sexo o cualquier distinción para poner en claro que son la banda más caliente del rock and roll en este festival.

Al día siguiente tendríamos a Alice Cooper, el padre del mismísimo shock rock, demostrando porque es una de las leyendas del género con un espectaculo que va más allá de sus grandes canciones gracias al show que forma en el escenario comenzando con el mismo frontman, sus talentosos músicos y el performance teatral que conformaron el cierre con broche de oro del Domination Fest en su primera edición.

Lo malo:

Sin duda los horarios y la localización de los escenarios. Desde que se anunciaron los días en que tocaría cada banda, muchos de los fans temían lo peor en cuanto al acomodo de sus grupos favoritos. Esto se confirmó en cuanto se lanzaron los horarios en redes sociales, donde las quejas, reclamos y mentadas no se hicieron esperar en los sitios oficiales del Domination Fest, pero no pasó a mayores y se siguió con el empalme de bandas.

La desgracia vendría en la localización de los escenarios, no solo por las distancias que eran muy similares a otros festivales y no representan problema en cuanto a trayectos, ya que se tienen espacios libres para caminar entre ellos.

El punto crítico vendría en que muchos de ellos se encontraban muy pegados y eso implicaría que el sonido de varios escenarios se pegara entre sí, poniendo en aprietos a varias bandas que tocaban en simultáneo y disgustando a los fanáticos que de por si estaban enojados con los horarios, con el sonido aún más.

Lo feo:

Lamentablemente para esta primera edición, esta distinción se la lleva Vince Neil que lastimosamente ya no es ni la sombra de lo que fue hace algunos años cuando vivía en la gloria con Mötley Crüe o incluso cuando inicia su carrera como solista. El vocalista se nota ya muy pasado de tamales, cansado de la voz, le cuesta mucho seguir las letras e incluso por momentos respirar en el escenario.

Algunos puristas dicen que fue el sonido, otros dicen que trataba de revivir viejas victorias comportándose como si tuviera 20, pero es un hecho que el show lo armó la banda Slaughter y el público que no paró de cantar el setlist conformado solamente por hits de Mötley Crüe.

La sorpresa:

Justamente en este punto es donde tenemos sorpresas nacionales e internacionales que asombraron en este Domination Fest y que dejaron buen sabor de boca para continuar con el proyecto el siguiente año.

En la parte de las sorpresas nacionales tuvimos a un par de bandas que sorprendieron bastante este año en el Domination Fest y justamente hicieron su aparición el día sábado durante el segundo día de actividades.

Primeramente tuvimos a Driven, abriendo el escenario principal con gran actitud, poderío femenino en la voz y sobre todo un proyecto que promete muchísimo de que hablar este año en la escena del metal mexicano.

En la segunda parte nacional tenemos a Nuclear Chaos, que poco a poco se consolidan como una banda de metal mexicano más reconocida, talentosa y con una expectativa de ver su crecimiento en planos mayores a los que ya han llegado, teniendo una recompensa muy justa con su participación en el Domination Fest.

Ahora vamos con los internacionales donde a pesar del cartel con grandes bandas y leyendas consagradas, una de las agrupaciones que dejó buen sabor de boca en el festival fue Avatar, que con un estilo de locura y metal llegarían desde Suecia hasta México para ganar nuevos fanáticos y dejar una promesa de volver con un show mucho más completo del gran espectaculo que ofrecieron en su primera vez en el país gracias al Domination Fest.

Y así fue como llegamos al final de esta primera edición del Domination Fest, que reunió a más de 50 bandas antes 120 mil asistentes en sus dos días de existencia. Con buenas sorpresas, leyendas en el escenario y gran ambiente en el público nos da la esperanza de volverlo a ver el siguiente año con mucho más poder del rock.