Más del 50 % de los jóvenes mexicanos no completan el ciclo superior de la educación secundaria, el porcentaje más elevado de los 34 países de la OCDE, que advirtió de que esas personas tienen luego dificultades para encontrar un empleo estable.
Un elemento preocupante incluso en una economía como la mexicana, con una de las menores tasas de paro, señala la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) en su informe sobre los principales indicadores sociales, que este año está centrado en la inserción laboral de los jóvenes.
Los autores del informe reconocen que el porcentaje de los jóvenes que ni trabajan ni están en formación bajó ligeramente en México desde 2005, cuando estaba por encima del 24 %, hasta 2015, cuando quedó en el 22.1 %, pero hacen notar que sigue muy por encima del 15 % de media en la OCDE.
Además, una gran parte de ese grupo, conocido como los “nini”, son inactivos, ya que sólo una sexta parte del total en México buscaba activamente un empleo, cuando son cerca de un tercio en el resto de la OCDE.
La mayor parte de esos jóvenes inactivos en México son mujeres (la probabilidad para éstas de formar parte de los “nini” es cuatro veces superior que la de los hombres), algo que supone un desafío en el país con la tasa más baja de empleo de madres de niños pequeños.
Los responsables de la publicación consideran que una parte de ese fenómeno tiene que ver con “la asignación tradicional de roles” de los hombres y las mujeres.
México es el país de la OCDE con mayores desigualdades: el 10 % de la población más rica tiene 20,9 veces más ingresos que el 10 % más pobre.
Información/Foto: Informador