De manera arbitraria y en desacato al fallo del juez, la Dirección de Bienes Aprendidos del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) de Panamá, insiste en subastar los vehículos propiedad de un empresario mexicano que intentan llevar a juicio, aún cuando los abogados del afectado afirman que hasta la fecha las autoridades no le han podido imputar ningún delito, cargos o pruebas que lo incriminen.

A pesar de que un juzgado ha declarado ilegal la venta de una decena de vehículos asegurados precautoriamente por la Procuraduría General de la Nación (PGN), el MEF, dependencia que dirige Héctor Alexander, ha llegado al punto de incluir un nuevo auto al Catálogo de Remates, aunque se sabe que todavía no hay sentencia que adjudique bienes al Estado, por lo que, los fiscales de Panamá y el MEF, siguen cometiendo atropellos en contra de empresarios e inversionistas, provocando fuga de capital privado.

“Este despojo que intenta hacer el MEF es violatorio al derecho de propiedad del empresario y a la garantía constitucional” ha declarado uno de los representantes legales, Javier Quintero, ya que reiteró no existe imputación alguna, a casi un año que se abrió el expediente mediante pruebas fabricadas.

El abogado señaló que detrás de esta ilegal acción se encuentran los fiscales Marcos Mosquera de la Guardia e Isis Soto, quienes han tratando de hacer ver ante los medios de comunicación, que se trataba de una incautación, cuando no fue así, ya que se descubrió que intentan vender los bienes mediante subasta pública.

Para evitar más violaciones al proceso hace unos días el equipo legal del empresario mexicana afectado anexó ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos una queja más en contra del Ministerio de Economía y Finanzas. “Se trata de un grave crimen lo que esta sucediendo, después de transferir mi dinero que son 7.2 millones de dólares a sus cuentas del MEF de manera ilegal, quieren desacatar las ordenes del juez y vender mis coches” insiste el empresario afectado.

El empresario afectado, cuyo nombre se reservan los abogados, cuestiona la complicidad del Gobierno panameño que ampara a funcionarios acostumbrados a pisotear las leyes a su antojo, y ahora tendrán que responder ante el pueblo cuando el acusado sea declarado inocente, pues el dinero obtenido por la venta de los bienes tendrá que ser pagado a su legítimo dueño con impuestos de los panameños.

El MEF se encuentra en completo desacato al persistir con la idea de subastar los vehículos, debido a que el juez ya falló a favor de la víctima y determinó que la dependencia no puede vender ningún activo, al no haber hasta el momento una sentencia. Bajo la lógica, de que nadie puede vender un bien ajeno.

Salvador Padilla, representante legal del empresario señaló que “es un absurdo de magnitudes inverosímiles lo que está haciendo Panamá, pues está tratando bienes asegurados ( indebidamente) como bienes adjudicados, lo que deja ver la carencia de Estado de Derecho por el que pasa la República de Panamá”

Ante el hecho de que insisten en vender los autos que no les pertenece, elos afectados hacen un llamado de advertencia a la población panameña, para evitar participar en esa subasta ya que el estatus de esos vehículos aún no está definido en los tribunales y solamente se encuentran bajo resguardo del Estado.